Se evidencia en el ambiente escolar el facilismo y la simplicidad con que los estudiantes resuelven las tareas y los problemas. El trabajo independiente es una aspiración que la mayoría de los educadores sienten para mejorar la calidad de los aprendizajes. Los docentes confían en que los estudiantes desarrollen sus habilidades, destrezas y mejoren los conocimientos. Los educadores se han planteado muy seriamente la cuestión de si el tiempo dedicado por los estudiantes a estudiar y asimilar los saberes y conocimientos es suficiente, es eficaz y es eficiente, o por lo contrario se necesita revisar los objetivos de la educación y las estrategias y técnicas de enseñanza aprendizaje, porque es más importante cómo se aprende, que lo que se aprende.
Las instituciones educativas deben orientar sus objetivos, más hacia los aspectos formativos y a enseñar a pensar por sí mismo, que a la erudición memorística. Es decir aprender a aprender, aprender a pensar, a actuar, a desenvolverse en público, a manejar las emociones y sentimientos, una educación para la vida, para el bienestar y para la felicidad. Para lograr esto se necesitan formadores bien entrenados, dotados de las herramientas necesarias para la creatividad, innovación y transformación.
El trabajo independiente es viable si hay formadores interesados en preparar los materiales, recursos y orientaciones necesarias para que el estudiante trabaje por su cuenta, disfrute de la actividad y no la realice por obligación, o porque hay que llevar tareas.
Se entiende por trabajo independiente el que realiza el estudiante sólo o con otros estudiantes con muy escasa ayuda de parte del profesor dentro o fuera de la institución educativa. La capacidad para este tipo de trabajo aumenta con la edad y con la formación del estudiante, pero su iniciación puede ser muy temprana. Es aplicable prácticamente, a todas las áreas del conocimiento, puesto que enseñar a aprender es fundamentalmente estudiar sin ayuda de los demás, por cuenta propia, por interés personal, autodidácta.
Hay en la actualidad abundante material audiovisual (diapositivas, audios, discos, etc.) material impreso (cartillas, documentos, libros, revistas, folletos) y películas de todo género.
FASES PARA EL TRABAJO INDEPENDIENTE.
· Fijar unos objetivos claros y bien definidos.
· Seleccionar la unidad o unidades de trabajo.
· Clasificar el material didáctico adecuado.
· Planificar varias actividades conducentes al logro de los objetivos.